La loba capitolina, es uno de los símbolos más extendidos en los territorios del antiguo Imperio Romano y en aquellos lugares donde se homenajea su herencia cultural. La escultura, cuyo original se encuentra en los Museos Capitolinos de Roma, recuerda la leyenda de Rómulo y Remo: hijos de Marte, abandonados en el río Tíber, sobrevivieron gracias a una loba que los amamantó. Años más tarde, Rómulo fundaría Roma y se convertiría en el primer rey de la ciudad.
Fotografía/Fotografie: Rubén Herranz 2008
Estatuas que recuerdan esta leyenda se erigen en multitud de lugares, como en algunas ciudades españolas de origen romano: Segovia, Mérida, Tarragona (a la que le robaron recientemente a Rómulo y Remo)...
En Bucarest, capital de un país que se proclama “tierra de romanos” no podía faltar una copia, precisamente en Piata Romana.
2 comentarios:
Conozco la loba que hay en Segovia al lado del acueducto. Me sorprendió por el tamaño tan pequeño de la escultura en si.
Esta loba y yo tenemos una relación un tanto especial. Le debo mucho.
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