Los rumanos no se sienten precisamente orgullosos de que les relacione con el personaje que inventó el irlandés Bran Stoker: el Conde Drácula. El país se debate entre huir de un personaje que poco tiene que ver con Rumanía (tachando de ignorante a los que lo reivindican) o dejarse seducir comercialmente por el marketing “draculiano”. Y es que en cualquier tienda para turistas podrá encontrarse mil y un cachivaches “vampíricos”, pero nunca encontraremos uno en casa de un rumano.
¿Vampiro, Voivoda, personaje de ficción o mito?
El Museo Nacional de Arte de Rumanía y el Museo de Historia del Arte de Viena han preparado una exposición muy ilustrativa, que relata por un lado como en torno al Vlad Tepes histórico se construyó una leyenda de sangre y crueldad, pues era lo que interesaba a los muy poderosos enemigos del Voivoda de Valaquia, entre las piezas de la exposición llaman la atención retratos de Tepes considerados fidedignos e históricos (como el del propio cartel) o un cuadro donde, como reflejo de la campaña en su contra, se le retrata como Poncio Pilatos, convirtiéndole poco menos que en verdugo de Cristo. También se explican los mitos y tradiciones relacionados con el vampirismo y las razones por las cuales se difunden por Europa (realmente exagerados por el europeos del Oeste, pera dar una imagen salvaje y misteriosa de la Europa del Este y Balcánica), apartado en el que por cierto se incluyen varios aguafuertes de Goya.
La exposición termina con los vampiros de la literatura y el cine, desde el género de terror al erótico, con proyecciones de algunas de las películas más conocidas.
Una magnífica exposición, que ha traído a Rumanía piezas de media docena de países, puede verse en el Museo Nacional de Arte de Rumanía hasta el 10 de octubre de 2010.
Más información:
DRACULA - voievod şi vampir
Muzeul Naţional de Artă al României, Bucarest ; Calea Victoriei 49-53
¿Vampiro, Voivoda, personaje de ficción o mito?
El Museo Nacional de Arte de Rumanía y el Museo de Historia del Arte de Viena han preparado una exposición muy ilustrativa, que relata por un lado como en torno al Vlad Tepes histórico se construyó una leyenda de sangre y crueldad, pues era lo que interesaba a los muy poderosos enemigos del Voivoda de Valaquia, entre las piezas de la exposición llaman la atención retratos de Tepes considerados fidedignos e históricos (como el del propio cartel) o un cuadro donde, como reflejo de la campaña en su contra, se le retrata como Poncio Pilatos, convirtiéndole poco menos que en verdugo de Cristo. También se explican los mitos y tradiciones relacionados con el vampirismo y las razones por las cuales se difunden por Europa (realmente exagerados por el europeos del Oeste, pera dar una imagen salvaje y misteriosa de la Europa del Este y Balcánica), apartado en el que por cierto se incluyen varios aguafuertes de Goya.
La exposición termina con los vampiros de la literatura y el cine, desde el género de terror al erótico, con proyecciones de algunas de las películas más conocidas.
Una magnífica exposición, que ha traído a Rumanía piezas de media docena de países, puede verse en el Museo Nacional de Arte de Rumanía hasta el 10 de octubre de 2010.
Más información:
DRACULA - voievod şi vampir
Muzeul Naţional de Artă al României, Bucarest ; Calea Victoriei 49-53
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